Trabajar en casa se ha convertido en un entorno habitual en la era del teletrabajo. Algunos pintores como yo fuimos pioneros y acondicionamos el mejor lugar de la casa para que la luz (una de nuestras herramientas de trabajo) fuera óptima. IMAGINEAN me planteó que además del entorno perfecto para la obra, debía de serlo para mi también. La mesa que utilizo como ilustrador tiene un tablero inclinado corredero, una cajonera "iceberg" (que asoman desde debajo de la mesa) y espacio para apilar. Y la iluminación artificial complementa la natural siguiendo el mi ritmo circadiano.
Posteriormente crearon el peine de cuadros. Convirtieron un viejo almacén en una atractiva sala en la que archivo mi obra y me permite mostrarla a mis clientes y curiosos de forma sencilla.
Arquitectura & Interiorismo. Fernando Altozano & Sebastián Severino
Construcción. Imaginean
Fotografía. Licinia Aliberti
